En la primera clase del tercer semestre de la materia de "Desarrollo de los Adolescentes III" comenzó un poco inusual ya que al presentarnos hacia la profesora Rosa Silvia nos dijo de que aparte de decir nuestro nombre diríamos el origen de éste, fue chistoso el ver a personas con las que he compartido poco más de un año diferentes cosas y a las que algunas de ellas considero mis amigos el hablar sobre ese tema, algo tan crucial y cotidiano como nuestros nombres, fue compartir algo íntimo de cada uno.
La siguiente actividad se trato de mirar dentro de una caja que se rolo entre todos, muchos hacíamos nuestras conclusiones sobre lo que contenía ya que de ahí teníamos que derivar un escrito. Al final resultó ser un espejo que te devolvía la mirada al momento en que lo abrías; la profesora nos dijo que contenía algo importante resultó ser cierto ya que debíamos decribir nuestra personalidad, aquellas características que creemos nos engloban para hablar de nosotros mismo, también sobre lo que consideramos es ésta.
Llegamos a la conclusión que la personalidad contiene aquello que nos define, como nuestras decisiones, nuestros gustos, nuestros pasatiempos, lo que es importante para nosotros, etc...Todo eso es lo que nos hace diferentes ya que podemos encontrar semejanzas con los demás pero nunca contendrá lo mismo, siempre tendremos variantes pero eso también nos hace únicos.
Es por eso que es muy importante la etapa de la adolescencia y que como futuros docentes debemos tener presentes siempre, tratamos con individuos que están en ese proceso difícil, tenerlos en consideración y ahondar en las posibilidades en los que podemos ayudar a que ese camino se haga menos confuso de lo que ya es; de esa manera lograremos una convivencia más sana en el aula, al tomar en cuenta todo aquello que define al adolescente.
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